Posibles sanciones para los involucrados directos.
Tras 14 días de investigación, con el objetivo de comprobar la veracidad de los polémicos audios del árbitro Francisco Gilabert, donde él acusaba haber recibido presiones para arbitrar de una cierta forma ante el partido entre Huachipato y Copiapó, se entregó una conclusión a cargo del oficial de cumplimiento, Miguel Angel Valdes, en donde informa que: las declaraciones de Gilabert fueron distorsionadas para desacreditar el arbitraje chileno y a la comisión encabezada por Javier Castrilli.
Tras la dura acusación que golpeo duramente a la ANFP y a la paralización de árbitros que obligó a Castrilli a congelar su cargo, mientras dure la investigación. Se contrató al abogado Valdés para detectar las irregularidades dentro de la institución, y se llegó a la conclusión de que los diálogos de Gilabert no coincidían con los que sostuvo con la cabina del VAR.
Esto evidenciaba las intenciones premeditadas para lograr desvincular a Castrilli por parte del sindicato de árbitros. ‘’Siento frustración. Me trajeron para una tarea que venía desempeñando, pero la situación y la coyuntura los obliga a tomar esta decisión’’, declaraba el ahora expresidente de la comisión de árbitros momentos después de su salida.
Todos estos antecedentes fueron entregados al Tribunal de Disciplina y Francisco Gilabert, Cristian Droguett, Felipe Jerez y Mario Vargas serán analizados para evaluar sus futuras sanciones y posibles desvinculaciones para siempre de la ANFP.
